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SOLLOÍNA

La Lengua

Bullshit

"Un escritor ha de poseer un detector innato de palabrería. De boludeces, dice una traducción argentina de bullshit; de pendejadas, dice una traducción mexicana, que sugiere de paso la variante española: gilipolleces".

Tantas palabras, Antonio Muñoz Molina.

Extendámolo a la vida misma.

Gramática (in)moral

El PSOE presentará enmiendas a la proposición de Ley de reforma del Estatuto de Autonomía de Andalucía durante su tramitación en el Congreso de los Diputados para adaptar su contenido al lenguaje no sexista, lo que exigirá modificar 116 términos o expresiones que actualmente figuran en el articulado (...) La pretensión de los socialistas es sustituir expresiones como 'andaluces' por 'ciudadanía andaluza'; 'funcionarios' por 'función pública', 'presidente' por 'presidencia', 'autónomos' por 'trabajo autónomo' o 'españoles' por el 'pueblo español'.

Es parte del comunicado difundido el viernes por la parlamentaria andaluza y secretaria de Igualdad de la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE, Maribel Montaño. Perdonen mi notable ignorancia, pero soy incapaz de entender la diferencia entre un término y otro e incluso pienso que en varios casos la pretendida equivalencia o sinonimia es errónea. Y lo más grave: desconozco en absoluto la relación de todo esto con el denominado lenguaje sexista. También deduzco que la señora Montaño y sus posibles asesores lingüísticos ignoran -y espero no incurrir en censurable sexismo- las recomendaciones de la Real Academia de la Lengua Española y su advertencia sobre el desconocimiento de lo que gramaticalmente se define como uso genérico del masculino gramatical.

Pero ya puestos, si nuestras autoridades quieren analizar el lenguaje del nuevo Estatuto pueden comenzar por el artículo de Rafael Sánchez Ferlosio, "Andazulía", publicado el viernes en El País [enlace vía Ciudadanos de Cataluña]. Se refiere al Preámbulo de la nueva norma que mañana debate el Congreso de los Diputados, y concluye así.

"El texto entero, en fin, confeccionado con pereza, con desinterés, y uno diría que incluso con aburrimiento y con desdén, acumulando tópicos y convencionalismos y adobándolo todo con muletillas pedagógicas y comodines moralizantes, parece puro relleno de un vacío ya innecesario por sí mismo y que, por tanto, precisamente rellenado se revela aún más positiva y manifiestamente vacío e innecesario. No sólo es "monstruoso" como pieza de literatura jurídica en sí misma, sino también por la tremenda inmoralidad que comporta el haberlo aprobado en calidad de documento público, para tirárselo a la cara a sus destinatarios, que se supone que son los andaluces".

Fue Amor

La palabra más bonita del castellano es AMOR, según los casi 50.000 internautas que han respondido a la encuesta lanzada por la Escuela de Escritores con motivo del Dían Internacional del Libro. Le siguen Libertad, Paz y Vida. La primavera se cuela en el quinto puesto con Azahar. La elección regresa luego a lo más obvio de Esperanza, Madre y Mamá. Y así hasta 7.130 términos.

En El País, Winston Manrique sondea a escritores, como Álvaro Pombo, que califica Amor de "elección zangolotina". La defiende, con las otras tres consecutivas, Trapiello: "Si perdiéramos la palabra amor, perderíamos la posibilidad de sentirlo. Y lo mismo sucede con las otras cuatro. No debe parecernos falta de imaginación que la gente las haya preferido a otras: las cuatro expresan realidades esenciales, son 'el nombre exacto de las cosas', la cosa misma".

La palabra

La palabra

Ella dice "sonoridad" y "azul". A mi me gustan aquellas cuya fonética te alían con el significado, como "amanuense" o "crepitar".

Hace meses, ella me remitió el reportaje sobre "Las 50 palabras más hermosas del español", de la revista venezolana Estampa. Ahora le devuelvo el envite.

La Escuela de Escritores de Madrid rinde homenaje al Día del Libro con una convocatoria para elegir, a través de su web, "La palabra más bonita del castellano".  Se puede participar hasta el 20 de abril y el resultado se conocerá tres días después.

Indaga en la memoria del insomnio, en el desasosiego de la esperanza, en el rumor de la clepsidra, en el resplandor de la caravana de letras que anochece en tu vista cansada. La has leído. La has oído. Vive en tí. Eres tú. Sólo tienes que asomarte al alféizar del azogue en que te desencuentras.

El arte del garabato

El arte del garabato Decálogo del escritor por Augusto Monterroso

"1) Cuando tengas algo que decir, dilo; cuando no, también. Escribe siempre.
2) No escribas nunca para tus contemporáneos, ni mucho menos, como hacen tantos, para tus antepasados. Hazlo para la posteridad (…) La posteridad siempre hace justicia.
3) En ninguna circunstancia olvides el célebre dictum: “En literatura no hay nada escrito”.
4) Lo que puedas decir con cien palabras, dilo con cien palabras; lo que con una, con una. No emplees nunca el término medio; así, jamás escribas nada con cincuenta palabras.
5) Aunque no lo parezca, escribir es un arte; ser escritor es ser un artista…
6) Aprovecha todas las ventajas, como el insomnio, la prisión o la pobreza. El primero hizo a Baudelaire, la segunda a Pellico y la tercera a todos tus amigos escritores…
7) No persigas el éxito (…) Aunque el éxito es siempre inevitable, procúrate un buen fracaso de vez en cuando para que tus amigos se entristezcan.
8) Fórmate un público inteligente…
9) Cree en ti, pero no tanto; duda de ti, pero no tanto. Cuando sientas duda, cree; cuando creas, duda…
10) Trata de decir las cosas de manera que el lector sienta siempre que en el fondo es tanto o más inteligente que tú. De vez en cuando procura que efectivamente lo sea; pero para lograr eso tendrás que ser más inteligente que él.
11) No olvides los sentimientos de los lectores…
12) Otra vez el lector. Entre mejor escribas, más lectores tendrás; mientras les des obras cada vez más refinadas, un número cada vez mayor apetecerá tus creaciones; si escribes cosas para el montón nunca serás popular…

(El autor da la opción al escritor de descartar dos de estos enunciados y quedarse con los restantes diez)".

Vía Eblog, que a su vez bebe de Ciudad Internet, otra estupenda web argentina, donde un artículo de L.L. explica los "consejos didácticos" de los grandes de la literatura. Allí se reproducen algunos de Abelardo Castillo:

* "Toda sintaxis es una concepción del mundo".
* "Cuidado con las computadoras. Todo se ve tan prolijo que parece bien escrito".

Palabros (I)

Convengamos con el profesor Arcadi que "el periodismo es un eufemismo". Que encara la realidad con un lenguaje atenuado. Que eso mismo nos permite "sobrevivir", "resbalar" por las palabras amaestradas. Convengamos.
Pero los políticos no tienen límites y a poco hacen trilerías con lo vocablos, aún cuando sean usados correctamente. Lo he oído la tarde pasada: "Decrecimiento". Quien lo decía, una destacada autoridad, se ha quedado tan satisfecha. Con todas las letras asumidas, como si nada. Explicaba que de 8.000 hemos pasado a 7.000. Omitió descenso, bajada, pérdida. El lenguaje directo abocado a un agujero negro mental. Hablaba de un millar menos. Decrecidos. Y eso que se lo achacaba al Gobierno anterior del PP.