Eutanasia para Montesquieu
Lo hechos, siempre los hechos en periodismo. A ver. Un juez dicta una sentencia. Al Gobierno de turno y al partido que lo sustenta no les gusta la decisión y se movilizan un fin de semana previo a las vacaciones de Semana Santa para modificar la ley y revocar el auto judicial.
Ya hubo en España quien dio a Montesquieu por muerto, sin éxito afortunadamente. Ahora el Congreso de Estados Unidos puede prolongar la vida a Terri Schiavo, la mujer que lleva 15 de sus 41 años en coma, pero ha dejado malherido al pensador francés de la división de poderes con la excusa de evitar un supuesto caso de eutanasia.
Vuelve a los hechos, becario. Tras años de litigio, el marido había conseguido que un juez estatal de Florida decidiera la desconexión de Terri de la máquina que la mantenía con vida, lo que se hizo el viernes pasado. Los padres de ella, de religión católica, se oponen. Los cristianos conservadores se movilizan en todo el país. El Senado norteamericano, de mayoría republicana, aprobó ayer domingo por unanimidad una norma que permite a los padres recurrir ante un tribunal federal la orden del magistrado estatal. La Cámara de Representantes lo ratificó (202/58) la pasada madrugadada en una sesión nocturna especial en la que un grupo de congresistas demócratas obligó a debatir el asunto. El presidente Bush, de regreso urgente a Washington desde su rancho en Texas para atender este caso, firmó la nueva ley apenas una hora después. Los padres de Terri ya han recurrido a un juez federal de Florida. Tienen las esperanza de que acuerde reinsertar las sondas de alimento a su hija, al menos hasta que adopte una resolución definitiva.
La mayoría republicana ha optado por la baza política para afianzar sus lazos con los grupos religiosos conservadores frente a lo que consideran poco menos que un asesinato. Los demócratas, aún no repuestos de la derrota de Kerry, denuncian la violación de la independencia del poder judicial y de la separación de poderes. Recuerdan que 19 jueces de toda condición han revisado el caso y han llegado a la misma conclusión: "Ella está en un estado vegetativo permanente".
Política. Como el cambio de una ley a conveniencia. Montesquieu en el alero de la democracia más importante del mundo. Podría repetirse con otra cuestión que incomodara a los gobernantes o a quienes los respaldan.
Pero... hablamos de la vida y la muerte. Me pregunto también: ¿Quién tiene la potestad de decidir? ¿No hay otra fórma que no sea dejarla morir por inanición? Supongo que habrá informes médicos preceptivos, estudios verificables, investigación judicial para esclarecer si el marido actúa por compasión o por interés, si los padres se aferran a creencias sin fundamentos para prolongar artificialmente una vida concluida. No tengo respuestas. Sólo el deseo de que quien haya de decidir acierte.
Ya hubo en España quien dio a Montesquieu por muerto, sin éxito afortunadamente. Ahora el Congreso de Estados Unidos puede prolongar la vida a Terri Schiavo, la mujer que lleva 15 de sus 41 años en coma, pero ha dejado malherido al pensador francés de la división de poderes con la excusa de evitar un supuesto caso de eutanasia.
Vuelve a los hechos, becario. Tras años de litigio, el marido había conseguido que un juez estatal de Florida decidiera la desconexión de Terri de la máquina que la mantenía con vida, lo que se hizo el viernes pasado. Los padres de ella, de religión católica, se oponen. Los cristianos conservadores se movilizan en todo el país. El Senado norteamericano, de mayoría republicana, aprobó ayer domingo por unanimidad una norma que permite a los padres recurrir ante un tribunal federal la orden del magistrado estatal. La Cámara de Representantes lo ratificó (202/58) la pasada madrugadada en una sesión nocturna especial en la que un grupo de congresistas demócratas obligó a debatir el asunto. El presidente Bush, de regreso urgente a Washington desde su rancho en Texas para atender este caso, firmó la nueva ley apenas una hora después. Los padres de Terri ya han recurrido a un juez federal de Florida. Tienen las esperanza de que acuerde reinsertar las sondas de alimento a su hija, al menos hasta que adopte una resolución definitiva.
La mayoría republicana ha optado por la baza política para afianzar sus lazos con los grupos religiosos conservadores frente a lo que consideran poco menos que un asesinato. Los demócratas, aún no repuestos de la derrota de Kerry, denuncian la violación de la independencia del poder judicial y de la separación de poderes. Recuerdan que 19 jueces de toda condición han revisado el caso y han llegado a la misma conclusión: "Ella está en un estado vegetativo permanente".
Política. Como el cambio de una ley a conveniencia. Montesquieu en el alero de la democracia más importante del mundo. Podría repetirse con otra cuestión que incomodara a los gobernantes o a quienes los respaldan.
Pero... hablamos de la vida y la muerte. Me pregunto también: ¿Quién tiene la potestad de decidir? ¿No hay otra fórma que no sea dejarla morir por inanición? Supongo que habrá informes médicos preceptivos, estudios verificables, investigación judicial para esclarecer si el marido actúa por compasión o por interés, si los padres se aferran a creencias sin fundamentos para prolongar artificialmente una vida concluida. No tengo respuestas. Sólo el deseo de que quien haya de decidir acierte.
2 comentarios
Opinión -
Confusa -