Con Jacques Lefranc

Es preciso defender la libertad. Es vital defenderse de los fundamentalistas, de los dogmáticos, de los dictadores, de los iluminados. De cuantos quieren imponernos sus creencias. Sean con rezos o con bombas.

Por eso, mi solidaridad con el director de France Soir, destituido por el propietario del periódico tras publicar las viñetas danesas que reproducían a Mahoma. Y no basta con pedir calma.