Blogia
SOLLOÍNA

Nacionalismo e izquierda

Nacionalismo e izquierda El escritor Félix de Azúa vuelve a dar una lección ética. Ahora desde el peor de los sitios: "Desde el centro de la diana", publicado hoy en El País. Pasen y lean:

"Hará cosa de un mes, un grupo de amigos y conocidos publicamos un documento implorando la creación de un partido no nacionalista en Cataluña ya que, a diferencia del País Vasco, aquí sólo hay partidos nacionalistas. Bien es verdad que el PP es constitucionalista, pero se trata de un partido tan obsesionado con los asuntos religiosos que no puede servirnos de ayuda. No va uno a sustituir una religión por otra. Entre el catolicismo de Roma y el nacionalismo de Carod, francamente... De modo que expresamos nuestra modesta opinión sobre un monopolio ideológico lamentable".

"En la democrática Cataluña es casi imposible ir de insumiso o de disidente. Quienes no pertenecen a la fratría patriótica y deportiva pasan mucho frío y les pegan los frailes. Hasta ahí, todo iba bien. Lo que no podíamos imaginar es que nos amenazaran de muerte. Suponíamos que Cataluña, a diferencia del País Vasco, ya había superado la Guerra Carlista. Nos equivocábamos. Un articulista del Avui, miembro de Esquerra Republicana, biógrafo de Boadella (a quien ahora quiere ver muerto) y del heroico Joan Puigcercós (a quien había puesto a parir unos años atrás), pedía a gritos nuestra eliminación física. Riguroso. Que nos pegaran cuatro tiros".

"Cuando nosotros pedimos un partido no nacionalista en Cataluña estamos pidiendo, también, un partido ajeno a la alianza entre el mundo de los grandes negocios locales y el nacionalismo. Porque (cosas del feto) el caciquismo y aquello que antes se llamaba "la oligarquía", son la base misma del nacionalismo, su más firme fundamento".

"No hay nacionalismo de izquierdas ni aquí, ni en Argentina, ni en los EE UU de Bush, ni en Croacia, ni en Japón, ni en ningún otro lugar del mundo. El nacionalismo es un disfraz del poder económico, su refugio y su coartada. En consecuencia, empiezo a creer que a nosotros no nos ha amenazado de muerte un militante de Esquerra Republicana sino los poderes fácticos. Como en una novela de Vázquez Montalbán o de Sciascia. Y eso ya da más miedo".

0 comentarios